Como os he comentado en la entrada anterior, estoy haciendo pequeñas transformaciones en la habitación de mi hijo, tras siete años... ( ¡¡ madre mía, como pasa el tiempo !!), hay que realizar ciertos cambios y en esta ocasión os enseño como cambiar el aspecto de una silla de una forma barata y sobre todo fácil.
El primer paso, destornillar el asiento, nada que no podamos hacer con un destornillador que seguro tenemos en todas las casas, el único desembolso que tendremos que hacer, o en su caso, pedirla prestada, es una grapadora como la que os enseño en la foto siguiente, si tenéis que adquirirla tampoco son muy caras y seguro que la usaréis en más de una ocasión.
A continuación viene la parte más delicada, una vez elegida la tela para tapizar, (os aconsejo tejidos resistentes, lonetas o similares ) teneis que colocarla bien estirada e ir grapando de forma que no queden arrugas, no hace falta que quiteis el tapizado que tenía la silla, ya que incluso os quedará más mullida.
Cuidado con las esquinas, probar antes de grapar y si os equivocais, es cuestión de quitar la grapa y volver a intentarlo, es mucho más fácil de lo que parece.
Finalmente colocamos de nuevo el asiento, volvemos a atornillar, le damos la vuelta y......... ¡¡ silla nueva !!
Si ya le hacemos un cojín con algún resto de la tela que nos haya quedado, no le quitaremos el ojo de encima a nuestra nueva creación, habremos conseguido de una forma fácil y barata alargar la vida a cualquier asiento de nuestra casa.
Espero que os haya ayudado con este tutorial y que os animéis a hacer cambios en vuestros hogares, ¿me enseñaréis vuestras fotografías?.
